Acetil Hexapéptido-8 (Argireline): Efecto “tipo Botox”, reduce las arrugas dinámicas.
GHK-Cu: Favorece la regeneración celular y combate el estrés oxidativo.
Palmitoyl Tripeptide-5: Estimula la síntesis de colágeno y la reestructuración dérmica.
Los péptidos cosméticos se han convertido en la piedra angular de las formulaciones avanzadas para el cuidado de la piel. A diferencia de los activos cosméticos tradicionales, los péptidos bioactivos pueden apuntar con precisión a los receptores de las células de la piel, estimulando la síntesis de colágeno, mejorando la elasticidad y reduciendo los signos visibles del envejecimiento.
Se ha demostrado clínicamente que los péptidos antienvejecimiento como Matrixyl (Palmitoyl Pentapeptide-4) y Argireline (Acetyl Hexapeptide-8) minimizan las arrugas y mejoran la suavidad de la piel al inhibir la liberación de neurotransmisores en los músculos faciales. Los péptidos de cobre (GHK-Cu) promueven la cicatrización de heridas, aumentan la producción de colágeno y brindan protección antioxidante, mientras que los péptidos de melanostatina regulan la síntesis de melanina, ofreciendo efectos seguros para iluminar la piel.

Acetil Hexapéptido-8 (Argireline): Efecto “tipo Botox”, reduce las arrugas dinámicas.
GHK-Cu: Favorece la regeneración celular y combate el estrés oxidativo.
Palmitoyl Tripeptide-5: Estimula la síntesis de colágeno y la reestructuración dérmica.
Los estudios clínicos muestran una reducción del 17 % en la profundidad de las arrugas y una mejora del 30 % en la elasticidad de la piel después de 4 semanas de tratamiento con formulaciones a base de Argireline. GHK-Cu ha demostrado un aumento de hasta un 70 % en la producción de fibroblastos y una tasa de regeneración de la piel un 30 % más rápida en modelos de laboratorio.